Es conocido el incremento de la temperatura del planeta aumenta la mortalidad relacionada con el calor, indicador especialmente significativo del avance del factor ambiental que tiene, por sí mismo, un gran impacto en la salud de la población.
Factor ambiental con mayor impacto en la salud
En lo relativo al calor, se estima que en España se dan cada año unas 1.300 muertes atribuibles a temperaturas excesivamente altas, lo que lo convierte en uno de los factores ambientales con mayor impacto en la salud.
La mortalidad asociada al calor no se cuantifica únicamente con lo que se conoce como “golpe de calor”, sino que también se relaciona con el agravamiento de patologías ya existentes (cardiovasculares y respiratorias, por causas renales, gastrointestinales e incluso neurológicas).
Campañas de prevención
Resaltamos las campañas de prevención realizadas durante los últimos años que han permitido disminuir el número de fallecimientos gracias a la alfabetización de la población, el reconocimiento precoz de síntomas y a las medidas preventivas llevadas a cabo por la población.
En principio cualquier persona puede verse afectada por el calor. Sin embargo, hay grupos de personas que son especialmente sensibles a los efectos del calor y a sus consecuencias, de ahí la importancia de la realización de actividades preventivas, el autocuidado y la detección precoz de síntomas.
Recordamos una actualización previa sobre medidas de prevención frente al calor
«¡Con este calor no se puede dormir!»
Por otra parte las altas temperaturas influyen en las alteraciones del sueño que presentan algunas personas en esta época del año.
Estas alteraciones del sueño pueden originar irritabilidad, somnolencia diurna, temblor, alteraciones de la afectividad, aumento del riesgo cardiovascular y accidentes laborales y de tráfico.
Hábitos de sueño saludables
Por ello, es importante que recomendemos unos hábitos de sueño saludable:
- Mantenga un horario regular de sueño, incluso los fines de semana.
- Haga alguna actividad relajante antes de dormir para «desconectar».
- Hacer ejercicio físico es genial, pero evite hacerlo a última hora del día.
- Evite, en la medida de lo posible, el tabaco y reduzca el consumo de cafeína.
- Evite ingerir bebidas alcohólicas antes de irse a la cama.
- Evite comidas y bebidas copiosas antes de irse a la cama.
- Las siestas no deben realizarse más allá de las tres de la tarde y no deben durar más de 20 minutos.
- Mantenga un entorno tranquilo en el lugar donde duerme.
- Saque de la habitación cualquier cosa que pueda impedirle el sueño (televisión, tabletas, etc.).
- Tome un baño templado antes de acostarse.
- No permanezca en la cama despierto. Si no puede dormir pasados 20 minutos, levántese y haga alguna cosa relajante hasta que vuelva a tener ganas de dormir.
- Procure exponerse a la luz solar durante el día
Infografías para pacientes
¡Os dejamos estas infografías de nuevo para que las podáis compartir con pacientes en las consultas!