Viruela del mono

La viruela es una enfermedad causada por un Orthopoxvirus de la familia Poxviridae. El género Orthopoxvirus incluye el virus de la viruela (el causante de la viruela), el virus Vaccinia (utilizado en la vacuna contra la viruela) y el virus de la viruela bovina. Igualmente incluye el virus de la viruela del mono (MPXV), un virus ADN, causante de la viruela de los monos (monkeypox [MPX]). Este MPXV actualmente es el Orthopoxvirus más importante desde la erradicación de la viruela humana.

La OMS consideró erradicada la enfermedad en 1979

En España la vacunación frente a la viruela se inició en 1903, y debido a la escasa cobertura se declaró vacunación obligatoria entre 1944 y 1979. La vacuna se administraba a los 20 meses de edad. Desde 1977 no se han informado casos de viruela humana en todo el mundo gracias a la vacunación.

Sintomatología y transmisión

La mayoría de los 497 casos confirmados de MPX, a fecha de 16 de junio de 2022, presentaron fiebre, astenia, exantema y linfadenopatías a lo largo de su proceso clínico. El mecanismo de transmisión más probable en 112 de los 116 casos de los que hay información disponible fue el contacto íntimo y prolongado durante las relaciones sexuales.

La vacunación postexposición de forma temprana puede prevenir la infección por MPX o presentar una clínica menos grave.

Las vacunas contra la viruela son efectivas para proteger a las personas contra la viruela del simio cuando se administran antes de la exposición. Los expertos también creen que la vacunación después de una exposición a la viruela del simio puede ayudar a prevenir la enfermedad o a hacerla menos grave.

Los CDC recomiendan que la vacuna se administre dentro de los 4 días posteriores a la fecha de exposición para prevenir la aparición de la enfermedad. Si se administra entre 4 y 14 días después de la fecha de exposición, la vacunación puede reducir los síntomas de la enfermedad, pero es posible que no la prevenga.

Actualmente en España se han establecido dos posibles escenarios diferentes:

  • Vacunación de los contactos estrechos identificados.
  • Vacunación de contactos estrechos que sean personas con alto riesgo de gravedad o de exposición.

Os animamos a leer más sobre el tema en la Actualización PAPPS de 2022 sobre Prevención de las enfermedades infecciosas. Actualización en vacunas.